Con sus 62 años acuesta, María Santiesteban González defiende su sueño: Ser una destacada productora del territorio. En el Polo Productivo 15 de Mayo, en las proximidades del poblado Juan Delio Chacón, tiene su finca donde crecen cultivos rústicos como plátano, yuca, calabaza,  además de otras hortalizas.

Mujer de tez blanca, pelo rubio y voz firme que dedica muchas horas a su propósito hacer llegar producciones al pueblo.

Ella comenzó a laborar en Mella Cítricos en la recolección de café, allí permaneció siete años, cuando decidió sumarse a la siembra de tabaco, rama en la cual siempre logró buenos resultados en la obtención de capas con calidad exportable.

Por su responsabilidad, amor y pasión por la tierra un día decidió sumarse a la producción de comida al pueblo, fue entonces cuando pidió un área para atender y cubrirla de varios cultivos y donde logra buenos resultados. En su casi cinco hectáreas, está mujer no pierde tiempo y aprovecha cada pulgada del área que atiende junto a su esposo.

Con acento en cada palabra que dice, ella sabe de las limitaciones de recursos, sin embargo nada la detiene, aplica la ciencia y la técnica,  emplea ceniza y estierco de animales para hacer crecer el sembradío.

Con satisfacción habla de sus aportes a la escuela y círculo infantil radicados en el poblado, además de tributar sus producciones al comedor de la empresa tabacalera.

En la conversación  María no deja de dirigir su mirada hacia el área que tiene acondicionada para dentro de poco sembrar arroz, es una hectárea solamente para empezar, comenta, pero seguro que como aprendió con el tabaco, también espera tener buenos resultados con la gramínea. Sonríe como expresión de estar segura en la nueva contienda como lo ha hecho con otros cultivos.

Nada, que en María Santiesteban González el almanaque no cuenta porque habrá María para rato.