Un ramo de flores blancas, para Vilma Espín, será el homenaje de las federadas pineras, en conmemoración al décimo octavo aniversario de la desaparición física de la Heroína y eterna presidenta de la Federación de Mujeres Cubanas, FMC.

El 18 de junio del año 2007, falleció en la Habana Vilma, paradigma y ejemplo de las mujeres cubanas que teniendo una alta responsabilidad en la dirección de la Revolución, supo educar a sus cinco hijos, ser esposa, dirigente y fundadora de la FMC.

Vilma, poseía una gran educación, se graduó en la universidad de Santiago de Cuba de ingeniera química, también fue deportista, y poseía una excelente voz como cantante, pero eligió el camino de la lucha por la libertad y la justicia social de su pueblo, acción que la llevó a ocupar importantes cargos que le permitió luchar por los derechos de las mujeres y las niñas.

NoNotable combatiente de la lucha de la clandestina trabajó bajo las órdenes de Frank País García, durante el alzamiento del 30 de noviembre de 1956 en Santiago de Cuba. Se unió al Ejército Rebelde en la Sierra Maestra cuando su vida corrió extremo peligro en la lucha urbana.

Vilma fue manantial de amor y respeto pero también firmeza y voluntad. Fue la legendaria Deborah de la lucha clandestina, la guerrillera del segundo Frente Oriental Frank País, que combatía, ayudaba en la logística y daba clases a los soldados.

Participó en los preparativos del alzamiento armado de Santiago de Cuba el 30 de noviembre de 1956, apoyo el desembarco de los expedicionarios del yate Granma. Fue una de las jóvenes santiagueras más audaces y que estremeció con su acción revolucionaria a la ciudad de Santiago de Cuba, ante la represión de la tiranía, su casa fue el cuartel general del movimiento 26 de julio.

Respaldó y organizó el suministro de armas y medicinas desde el llano hacia las lomas donde se encontraba luchando el Ejército Rebelde.

Tras el triunfo de la Revolución, fundó la Federación de Mujeres Cubanas, junto a Fidel el 23 de agosto de 1960, y los círculos infantiles.

Integró el Comité Central del Partido Comunista de Cuba desde su fundación en 1965, y luego como miembro del Buró Político. Dentro del Parlamento encabezó la Comisión Nacional de Prevención y Atención Social, y la Comisión de la Niñez, la Juventud y la igualdad de derechos de la Mujer hasta su fallecimiento.

Vilma tenía 77 años en el momento de su fallecimiento, debido a una enfermedad, hoy las cubanas recordamos su legado y ejemplo. Su historia nos inspira a continuar trabajando por el fortalecimiento de la organización, por el respeto y la atención a los adultos mayores, a los padres, a los vulnerables, a las mujeres y las niñas.

Desde el 18 junio de 2007, sus restos descansan en el Mausoleo del Segundo Frente Oriental Frank País, en la provincia de Santiago de Cuba rebelde ayer, hospitalaria hoy, heroica siempre, ciudad hermosa y símbolo de lucha de la nación cubana.

En este día las federadas pineras recuerdan a esta gran mujer, Vilma Espín, quien supo darles esperanzas a las féminas cubanas y enseñarles a defender sus derechos en la sociedad.