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Honor a quien honor merece

Publicación: 11 Feb, 2025

“Y me hice maestro que es hacerse creador”, frase martiana que se multiplicó por toda una vida en los educadores jubilados del sector educacional, en el Consejo Popular Abel Santamaría, que con grandeza y esfuerzo formaron a muchos pineros.

Nombres como Agustín Dorumyny Vega, Marta Sosa Guerra, Mirta Zayas Alvares, Leocadia Videaux Díaz, Jorge Luis Viamonte Echevarría, Olga Méndez Fernández, Martin Companioni Lugo, Milagros Taquechel Domecq, y Teresa   O’Reilly Morales, distinguen el magisterio en la Isla de la Juventud, por su permanencia en el sector por más de 40, 50 y 60 años.

Muchos de estos hombres y mujeres llevaron la luz de la enseñanza a los pineros, a los alumnos de las provincias orientales que cursaron estudios en las secundarias básicas en el campo, a los becarios extranjeros, y en otras naciones del mundo, donde con su ejemplo y entrega hicieron posible el sueño del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, demostrando que el verdadero maestro no solo enseña, inspira.

Ternura, amor, e investigación caracterizan a los jubilados de la Isla de la Juventud, algunos de ellos continúan su  profesión, a pesar de haber cumplido su tiempo laboral, motivo por el cual recibieron el homenaje en su comunidad donde han dejado su huella, no solo en el corazón de sus discípulos también en sus familiares.  

El encuentro, organizado por Niuris Figueroa Martínez, presidenta de ese Consejo y delegada de una de sus circunscripciones, devino en agasajo a los educadores  constructores de sueños y arquitectos del futuro.

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