En la Isla de la Juventud lo más significativo del impacto del evento meteorológico son las intensas precipitaciones desde el martes, con acumulados superiores a los cien milímetros en Punta del Este.

En esta ínsula se adoptaron todas las medidas preventivas, incluyendo la protección de los recursos y la vida de los residentes en el costero poblado Cocodrilo, donde hoy se reportaron ligeras penetraciones del mar, olas de hasta tres metros y rachas de viento de ochenta kilómetros por hora, según comunicó Evelio Lavadi, delegado de la circunscripción.

Los embalses pineros son vigilados ya que nueve están vertiendo y las autoridades locales insisten en no bañarse, ni pescar en los aliviaderos de esas obras hidráulicas. Se supo también de afectaciones en la línea de 33 KV en zonas rurales que se resolverá en la medida que mejore el tiempo y los obreros puedan accionar.

Mientras se mantienen suspendidas las clases, el transporte de Ómnibus Público, y el marítimo. También se protegieron las mercancías de los almacenes de la economía y las embarcaciones pesqueras están en tierra.

Desde inicio de semana se recogieron productos agrícolas para el consumo, se drenaron plantaciones y los medios de prensa llaman a la disciplina ante las intensas lluvias para evitar accidentes.

En el municipio especial los cajeros electrónicos están abiertos para que los pineros saquen dinero de ser necesario, además los mercados agropecuarios están cerrados así como las bodegas y otras instituciones públicas.