Antonio Núñez Jiménez constituye una de las grandes personalidades cubanas del siglo XX, a quien sobrevive una voluminosa obra creativa en su primer centenario.

Nació el 20 de abril de 1923 en Alquízar, provincia de La Habana (actual provincia de Artemisa), y falleció en la ciudad de La Habana, el 13 de septiembre de 1998, hace hoy 26 años.

Núñez Jiménez fue un curioso de la naturaleza sin tiempo para descansar: su placer era bajar a las profundidades, subir a las cumbres ya fuera el pico Turquino de Cuba o Los Andes sudamericanos, navegar por el río Toa, cubano, o las grandes vías fluviales de Nuestra América.

Amante de la espeleología, a los 16 años comenzaron sus exploraciones en la Loma de Candela, en Güines, provincia de La Habana y poco después fundó con varios amigos la Sociedad Espeleológica de Cuba.

Con pocos recursos económicos y mucho entusiasmo, Núñez Jiménez y sus amigos de esta Sociedad, ayudados por guías campesinos voluntarios, hicieron sus incursiones por el Pan de Guajaibón, las Cuevas de Bellamar, la península de Guanahacabibes, la Sierra Maestra, y la entonces Isla de Pinos.

Enamorado de la geografía insular, realizó siete viajes de exploración e investigación a Isla de Pinos, actual Isla de la Juventud, la segunda isla cubana, en especial en Punta del Este.

Un testimonio fiel de lo hallado por él y su equipo en estos parajes fue publicado en la revista La Tierra en 1944: esta fue la primera crónica de su primer bojeo a Isla de Pinos, realizado del primero al ocho de febrero del propio año.

Núñez Jiménez se maravilló con la Playa de Punta del Este, tan bella como Varadero, dice en su relato; así como de las pictografías aborígenes que existen en cuevas, las cuales describió con la exactitud de fotografía. 

Durante los seis viajes restantes a la ínsula,  escribió textos como “Nuevos descubrimientos arqueológicos en Punta del Este, Isla de Pinos”, y “La legendaria región”… Nos dejó ese llegado: la historia y belleza de nuestros paisajes escritos desde la mirada de un apasionado conocedor de la geografía y la espeleología.

Un día como hoy, hace 26 años, Cuba perdía a Antonio Núñez Jiménez, al hombre de ciencias comprometido con el sueño de la emancipación social, al capitán del Ejército Rebelde. Murió a los 75 años, cuando se desempeñaba al frente de importantísimas instituciones culturales y científicas del país.