La búsqueda de la vacuna, los tratamientos mensuales inyectables y un nuevo plan de abordaje para los niños son las noticias más relevantes en el camino para curar el VIH/SIDA. Te las contamos.
Curar el VIH/SIDA aparece cada vez más cerca en el horizonte médico y los avances cientÃficos del año 2022 fueron alentadores. En febrero recibÃamos la noticia de la tercera paciente en el mundo que presentaba remisión completa de la enfermedad tras un trasplante de células madre.
Esta técnica, junto con los nuevos conocimientos en inmunologÃa, aceleran el proceso de mejora de los tratamientos. Aunque la consecución de una vacuna se retrasa y es, quizás, lo que la mayorÃa de la población espera, se han dado pasos hacia delante.
Vamos a repasar las noticias más importantes del 2022 que nos hacen pensar en la posibilidad concreta de curar el VIH/SIDA.
Anticuerpos ampliamente neutralizantes (bNAbs)
Con el nombre en inglés de broadly neutralizing antibody (bNAbs) conocemos a una serie de anticuerpos que podrÃan ser la clave para la vacuna contra el VIH. Si bien se pretende que una inmunización genere en los humanos la producción de estas sustancias de manera natural, por ahora solo podemos fabricarlos en laboratorio.
La investigación con bNAbs no es reciente. Desde el año 1999 existen ensayos clÃnicos que intentan conseguir una vacuna basada en estos anticuerpos, como lo repasa un artÃculo de Nature. Sin embargo, los resultados han sido pobres, con muchas fallas y un 31 % de efectividad en uno solo de los ensayos, finalizado en 2009.
Según un análisis cientÃfico de octubre de 2022, falta bastante por avanzar. La teorÃa apoya el uso de estos anticuerpos, pero las aplicaciones concretas se enfrentan a obstáculos que son imponderables todavÃa. Resulta que el virus del VIH tiene mucha capacidad de evasión (se esconde con facilidad), es diverso genéticamente y se acopla con el sistema inmunitario del huésped de una manera muy intrÃnseca.
Algunos registros de este año corroboraron que pacientes tratados con bNAbs remitieron su carga viral por un pequeño tiempo. Luego, pasadas las semanas o los meses, el efecto no se sostuvo y tuvieron que retomar la terapia antirretroviral clásica.
Por lo pronto, no hay una vacuna efectiva para curar el VIH/SIDA ni prevenirlo.
No obstante, el 2022 marcó el inicio de los incipientes resultados favorables. Ahora se seguirá avanzando en la búsqueda de un efecto persistente, sin que los pacientes tengan que regresar a la terapia con antirretrovirales.

Los nuevos antirretrovirales
La terapia antirretroviral o TARV sà tiene resultados muy notorios. Cada año se descubren nuevas combinaciones de fármacos y nóveles medicamentos que se suman al arsenal terapéutico.
En la última década, si bien no se ha logrado curar el VIH/SIDA, ha pasado de ser una enfermedad mortal a una patologÃa crónica, tratable, con buena calidad de vida para los pacientes. El diagnóstico ya no significa una pena de muerte.
Quizás, el avance más notable de 2022 fue la instauración de los tratamientos inyectables de acción prolongada. Es decir, nos encontramos en la puerta que nos hará pasar de comprimidos orales de TARV que se toman a diario hacia inyecciones semanales o mensuales.
Esto mejorará la adherencia al tratamiento y la comodidad de los pacientes.
En agosto de 2022, lenacapavir recibió aprobación para su comercialización en la Unión Europea. Es un principio activo que se consigue en una variante inyectable y que se puede sumar a otros esquemas de TARV en pacientes que son resistentes al abordaje tradicional.
Un estudio cientÃfico de este año corroboró la actividad in vitro de lenacapavir y aseguró que no tiene interacción con otros medicamentos que ya se emplean en los pacientes con VIH/SIDA. Por lo tanto, se asume que no generará resistencia.
En su forma subcutánea, serÃa posible administrarlo cada 6 meses.
Cabenuva ® es el otro gran avance del 2022. Según los resultados de los ensayos ATLAS y FLAIR, una inyección mensual de este preparado es igual de efectivo que la TARV clásica.
Se trata de una combinación de dos principios activos: cabotegravir y rilpivirine. Su aplicación espaciada en el tiempo favorecerÃa la adherencia por parte de los pacientes y reducirÃa el riesgo de toxicidad, por lo que se espera que cada vez haya más indicaciones de este esquema terapéutico.
Cabotegravir para la preexposición
Uno de los dos componentes de Cabenuva ®, cabotegravir, ya habÃa recibido aprobación en 2021 para ser usado en la profilaxis preexposición. Esta estrategia se emplea en personas que están muy expuestas y en alto riesgo de contraer el virus.
Antes de esta aprobación, la profilaxis preexposición se basaba en pastillas por vÃa oral. Cabotegravir se puede aplicar una vez cada dos meses, tras haber iniciado, por primera vez, con dos dosis separadas por un solo mes entre sÃ.
Nuevo plan terapéutico para los niños
Si curar el VIH/SIDA es una prioridad de salud pública y de la investigación, hacerlo en los niños infectados parece más urgente. Según UNICEF, cada dos minutos un pequeño se infecta con el virus en el mundo.
El ensayo clÃnico ODYSSEY ha traÃdo una propuesta novedosa para el tratamiento de los menores con VIH. Mediante un esquema basado en el medicamento dolutegravir, se alcanzaron tasas exitosas de control con dosis adaptadas al peso. De esta manera, desde el mes de vida se podrÃa brindar esta TARV, con unas tabletas solubles.
Según los informes más recientes, las tabletas solubles de dolutegravir son seguras y presentan pocos efectos adversos. Los investigadores recalcan que se pueden indicar en niños que pesan entre 3 y 20 kilogramos, lo que augura un amplio margen de uso.

No solo se trata de curar el VIH/SIDA, sino de prevenirlo
Los esfuerzos en la prevención de la enfermedad no pueden reducirse. Aun alcanzando una cura o una vacuna, seguirá siendo primordial la educación en buenas prácticas para reducir el contagio.
Por otro lado, se necesitará un compromiso firme de los entes gubernamentales para financiar la aplicación de lo que ya tenemos ganado. En esta lÃnea, los Estados deberán invertir en la distribución de los inyectables de acción prolongada, sin descuidar la implementación de los programas educativos sobre salud sexual y reproductiva.
Los estudios sociológicos tampoco podrán perder su espacio en el próximo año. Estas aproximaciones permiten conocer los grupos de riesgo y la vulnerabilidad de ciertas poblaciones. Con esos datos, la prevención se hace más eficiente.
Curar el VIH/SIDA es una meta. En el camino estamos y no podemos bajar los brazos.
Tomado de Mejor con Salud